Israel habría prohibido a los medios de comunicacón de su país que mencionaran que el ejecutado periodista estadounidense Steven Sotloff era también ciudadano israelí, según afirmó el canciller del Estado hebreo Avigdor Lieberman.
El movimiento yihadista Estado Islámico publicó un video esta semana de la decapitación de Sotloff, describiendo la ejecución como una venganza por los ataques aéreos por EE.UU. contra sus posiciones en Irak.
La doble nacionalidad de Sotloff fue revelada luego que la Casa Blanca autentificara la grabación. «Los censores emitieron una orden de silencio para el tema de la doble nacionalidad de Sotloff», comentó Lieberman, en una entrevista con el canal 10 de la televisión israelí, citada por Reuters.
El ministro precisó que la medida estaba destinada a reducir el riesgo para el periodista secuestrado en Siria el año pasado.
Los censores militares israelíes tienen el derecho de bloquear informes mediáticos en su país si representan una amenaza a la seguridad nacional.
¿Trataba Israel de salvar a Steven Sotloff?
El ministro evitó responder a la pregunta sobre si Israel había tratado de rescatar a Sotloff, señalando solo que «hubo esfuerzos, tanto estadounidenses como europeos, para liberar a los rehenes».
Según las leyes israelíes, los ciudadanos que viajen a Estados enemigos, como Siria, llevando segundos pasaportes, pueden enfrentarse a prosecución cuando vuelvan.
Si son secuestrados, el Gobierno israelí no está obligado a procurar su repatriación, dicen expertos.
Un alto funcionario israelí dijo a Reuters que no estaba al tanto de los esfuerzos del Gobierno para rescatar a Sotloff, quien había colaborado con varios medios hebreos.
Sin embargo, Franklin Lamb, director de la ONG estadounidense Preocupados por la Paz en Oriente Medio, escribió para el portal ‘Intifada’, citando a «fuentes informadas», que Israel había ofrecido 10 millones de dólares al Estado Islámico por la liberación de Sotloff.
Según las fuentes citadas el Mossad, el servicio secreto israelí, ejecutó el primer pago, pero el mediador encargado de entregarlo a los yihadistas robó el dinero.
Todavía se desconoce si el Estado Islámico había exigido un rescate por la vida de Sotloff. Según los datos del diario ‘The New York Times’, los yihadistas solicitaron un rescate de 100 millones de dólares por James Foley, periodista estadounidense ejecutado el mes pasado. Pero Washington se negó a pagarlo.