Un teléfono celular salvó la vida del encargado de una gasolinera en la Florida cuando el aparato detuvo la bala de un asaltante.
La policía de Winter Garden informó que el dependiente tuvo sólo heridas leves después de que un asaltante le disparó en el abdomen. Los oficiales dijeron que el teléfono lo salvó.
Un hombre entró a la gasolinera y pidió ayuda al empleado. Entonces le mostró un revolver y le pidió que abriera la caja de seguridad.
Cuando el encargado no pudo abrirla, el ladrón le pidió a otro empleado que lo intentara pero tampoco pudo.
El sospechoso disparó a uno de los empleados y huyó.
La policía informó que el encargado no tenía idea de que la bala había golpeado su teléfono hasta que lo sacó del bolsillo de su camisa.
Agencias