Periodistas alemanes han descubierto que los servicios de Inteligencia germanos han estado espiando a Turquía desde 1976. Este dato toma especial relevancia después de que la canciller Angela Merkel dijera que «espiarse entre amigos es inaceptable».
Cada cuatro años Alemania publica listas de los países que constituyen el objetivo prioritario para la Inteligencia germana. En esta relación de países Turquía apareció por primera vez en 2009, pero, según la revista ‘Focus’, la Inteligencia alemana ha estado espiando a Ankara desde hace mucho más tiempo, como mínimo desde 1976, bajo las indicaciones del Gobierno del canciller Helmut Schmidt.
El responsable de la Unión Social Cristiana sobre la política interior, Hans-Peter Uhl, señaló que existen «motivos sólidos» para espiar a Turquía, como el terrorismo y el tráfico de drogas y de personas. «Tenemos que saber qué esperar de Turquía, país candidato a la adhesión a la UE», dijo Uhl.
Según los medios alemanes, el Gobierno de Berlín confecciona una lista en la que los países están divididos entre los que son objetivos de supervisión y simple monitoreo (por ejemplo, el Reino Unido), y los que son objetivos prioritarios de vigilancia para la Inteligencia alemana (Turquía o Albania). Para los primeros, Berlín utiliza solo fuentes abiertas de información, mientras que a los segundos los observa con otros métodos de vigilancia, como por ejemplo las escuchas telefónicas.
Al conocer los resultados de la investigación de ‘Focus’, Turquía afirmó que espera recibir explicaciones de Alemania.