Dos casos nuevos de ébola se presentaron en Nigeria, pero los nuevos contagios corresponden a personas distintas de las que atendieron al pasajero de una aerolínea que llegó enfermo y murió, dijo el viernes el ministro de salud, Onyebuchi Chukwu.
Las dos personas contagiadas son esposos de un hombre y una mujer que tuvieron contacto directo con Patrick Sawyer, el ciudadano nacido en Liberia pero criado en Estados Unidos que voló hacia Nigeria el mes pasado ya contagiado del virus y contagió a 11 personas antes de morir en julio, entre ellos el hombre y la mujer que lo atendieron y que después murieron a causa del ébola, dijo Chukwu a periodistas en Abuja, capital del país.
Las autoridades nigerianas sostuvieron que el riesgo de exposición a otros fue mínimo porque Sawyer fue colocado en aislamiento tras su arribo al aeropuerto, pero la comisionada de salud del estado de Lagos, Jide Idris, reconoció a principios de mes que Sawyer no fue puesto en cuarentena de inmediato al primer día de su llegada.
Los dos casos nuevos elevan a 14 el número de personas con la infección en Nigeria, incluyendo a Sawyer. Cinco han muerto a causa de la enfermedad, cinco se recuperaron y fueron dados de alta mientras que cuatro más están aislados bajo atención en Lagos, la ciudad más importante del país, donde aterrizó el avión que llevaba a Sawyer.
El daño ha sido mucho más grande en Guinea, Sierra Leona y Liberia, en donde se han registrado cientos de casos. Liberia es el país donde ha habido más muertes, con 576.
En Liberia, un adolescente murió tras recibir disparos de las fuerzas de seguridad en un barrio pobre que esta semana fue bloqueado por la policía para evitar la diseminación del brote, dijo el viernes un vocero del gobierno.
Shakie Kamara, quien de acuerdo con sus familiares tenía 15 o 16 años, fue una de tres personas que sufrió heridas graves durante un enfrentamiento ocurrido el miércoles cuando las fuerzas de seguridad bloquearon los caminos de acceso al barrio de West Point, donde viven al menos 50.000 personas.
En una entrevista transmitida por radio el viernes, el ministro de Información, Lewis Brown, confirmó la muerte de Kamara pero justificó las acciones de las fuerzas de seguridad, y aseguró que éstas trataban de evitar los disturbios y saqueos en West Point.
El incidente elevó la tensión en West Point, que ya era una zona álgida. La semana pasada, los residentes atacaron un centro donde se atendía a enfermos de ébola al darse cuenta de que habían llegado pacientes de otras partes de la ciudad. Los saqueadores se apoderaron de materiales, entre ellos colchones y sábanas con restos de sangre que podrían diseminar la enfermedad.
ABUYA, Nigeria (AP)