3 mil estudiantes de 23 países latinoamericanos y caribeños concluyeron en la declaratoria del decimo séptimo congreso, que son jóvenes comprometidos con la liberación social de los pueblos e instaron a los gobiernos a promover la integración.
«Nos solidarizamos con el hermano pueblo de Palestina, permanentemente sometido a la sangre y fuego por el sionismo fascista …instamos a los gobiernos de América Latina, saludando los avances de plataformas como el Alba, Unasur, Mercosur y Celac a seguir incrementando los esfuerzos por la integración de nuestras naciones», dicta parte de la declaratoria.
El acto de clausura estuvo presidido por el presidente Daniel Ortega, quien resaltó la dedicatoria del congreso al presidente venezolano Hugo Chávez Frías. «Chávez no se murió, fue un tránsito hacia la inmortalidad y está aquí en esta plaza y en el corazón de esta juventud», señaló.
El presidente felicitó los esfuerzos que desde la juventud se están haciendo para unir a los pueblos e instó al movimiento estudiantil a estar dispuestos a la lucha social y política.
«Nos hace sentirnos orgullos a los que estamos un poco mayores, porque es una declaración digna de una juventud revolucionaria, comprometida con la lucha de los pueblos del mundo, no es una juventud egoísta», dijo el mandatario.
Durante los últimos cuatro días los jóvenes sostuvieron encuentros para dialogar sobre temas de actualidad, como educación, movimiento estudiantil, coyuntura política y unidad de los pueblos.