Jumud es un hombre de 48 años que padece de obesidad mórbida y que no puede moverse ni caminar, y que lo ha mantenido postrado en su casa desde hace 3 años.
Según el diario Al-Hayat de este país, el hombre ni siquiera puede sostener algo en sus manos, por lo que lo único que hace es rogarle a Dios para que lo sane.
Los doctores que lo han visitado y examinado, le han dado la indicación de que su enfermedad es terminal y que no puede ser curada.
«He pasado en cama por los últimos 3 años y peso más de 300 kilos, no tengo esposa ni hijos y he vivido solo en un apartamento rentado en la parte más al este de Riyadh. Tengo que pagar SR20,000 en renta, mientras que mi pensión es solamente de SR1,700 mensuales, de los cuales el banco me deduce SR500, por un préstamo que realice para mi mantenimiento», dijo Jumud.
Tras solicitar tratamiento al Ministerio de Salud, Jumud fue visitado por un equipo médico que le diagnosticó elefantiasis antes de advertirle de que moriría pronto y que debía quedarse en casa esperando la muerte.
«Pedí al Ministerio de Asuntos Sociales que me proporcionara un asistente que me ayudara en mis tareas diarias, así como una silla de ruedas para poderme mover, pero ignoraron mi solicitud por completo y no prestaron atención alguna a mi caso», explicó Jumud.
El hombre contó que sus vecinos le han buscado una persona para que le asista.
Además de su condición de obesidad mórbida, Jumud también es diabético. y doctores especializados han dicho que requiere de intervención quirúrgica inmediata si desean salvarle la vida.
AGENCIAS