Un nuevo bombardeo de Estados Unidos al norte de Irak ayudó a los kurdos a arrebatar a los integrantes del Estado Islámico (EI) de la represa más importante del país.
"La represa de Mosul ha sido completamente liberada", declaró Ali Awni, un responsable del principal partido kurdo.
Awni afirmó que los combates se llevan a cabo actualmente en Tal Kayf, una localidad controlada por los terroristas de EI, a unos cien kilómetros de la represa.
La mayor parte de Mosul fue controlada por los terroristas el pasado 7 de agosto, mientras que EE.UU. inició bombardeos un día después en apoyo a los kurdos. En los dos últimos días aviones y drones norteamericanos han lanzado unos 23 ataques aéreos, 14 de ellos el domingo, que destruyeron vehículos militares y un puesto de control del EI.
La violencia en Irak no parece detenerse desde que los yihadistas lanzaron una ofensiva el 9 de junio al norte de Bagdad, que se extendió a principios de agosto a las localidades próximas a la región autónoma del Kurdistán.
Se calcula que el avance y el terror de los yihadistas en Irak ha provocado la huida de unas 200 mil personas y que más de 40 mil, en su mayoría yazidíes kurdos y cristianos; algunos de ellos permanecen atrapados en el Monte Sinjar y con necesidad urgente de agua, comida, refugio y medicinas.