Las conversaciones entre Argentina y el mediador de los fondos buitre prosiguen este miércoles en Nueva York (Estados Unidos), con el ministro de Economía argentino, Axel Kicillof, al frente y una nueva propuesta ante los mentores judiciales en el Día Cero para encontrar un arreglo al conflicto.
Las partes deben llegar a un acuerdo antes de la medianoche de este miércoles, porque de lo contrario, Argentina puede ser declarada en cesación de pagos (default) a través de los bancos norteamericanos, a causa del fallo impuesto por el juez Thomas Griesa.
Dicha sentencia impide que depósitos colocados por el gobierno argentino en el Banco de Nueva York y en el Citibank puedan ser canalizados a sus acreedores hasta tanto le pague a los fondos buitre lo que estos exigen.
El equipo económico de Argentina intenta desde la semana pasada encontrar una solución con el grupo de bonistas; esta vez propone como alternativa de solución que su banca privada le compre los bonos a los fondos buitre. Los líderes de la Asociación de Bancos de Argentina (Adeba) viajaron anoche a Nueva York para sostener su oferta de comprar toda la deuda en litigio.
Como garantía, proponen unos 250 millones que es la suma para contentar a la financista NML Capital, del magnate Paul Singer, el principal fondo buitre litigante, señalaron fuentes de la Adeba. El conflicto que encara Buenos Aires es tan solo con el 0,8 por ciento de los bonistas que presentaron el litigio legal.
Si la oferta llega a buen puerto y los bancos argentinos quedan en manos de los bonos, se pediría al juez Griesa que suspenda la aplicación del fallo que amenaza al país.
De esta manera, Argentina evitaría que se active la cláusula RUFO (Derechos sobre Futuras Ofertas) que avala a los bonistas reestructurados a cobrar cualquier oferta mayor que aceptaron en la reestructuración de la deuda en 2005 y 2010.
La reunión de hoy todavía no tiene un horario de comienzo establecido. Kicillof arribó en la tarde del martes de manera sorpresiva proveniente de Caracas (Venezuela), donde acompañó a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en la cumbre del Mercosur.