La alcaldesa de Ticuantepe, Ligia Ramírez, inauguró el adoquinado de una calle del barrio Medardo Andino de esa localidad, cuyo trabajo, financiado con transferencias del gobierno del presidente Daniel Ortega y la compañera Rosario Murillo al municipio, sacó del olvido a más de 50 familias del sector, quienes para salir de sus casas tenían que pasar por un cauce, en el cual peligraban en tiempo de invierno.
La edil Ramírez, quien con la comunidad se unió para realizar un acto cultural, seguido de una fiesta, dijo que la vía era conocida por los habitantes del barrio como la Calle del Olvido, porque ninguna administración edilicia anterior hizo algo por ellos, a tal punto que con el tiempo las casas junto al cauce comenzaron a peligrar.
La compañera Ramírez recordó que la calle era un cauce natural, pero con los fondos de transferencia del gobierno nacional al municipal, se logró realizar la construcción de la hermosa vía adoquinada.
De acuerdo con la alcaldesa, la obra de adoquinado se extendió por 2 cuadras y con la obra se eliminó el basurero en que se había convertido el cauce, lo que se logró con la transferencia de un millón 183 mil 844 córdobas enviados por el gobierno central.
Destacó también que la municipalidad de Ticuantepe lleva ya ejecutados más del 67 % de los proyectos programados, como calles adoquinadas en las diferentes comunidades, una alternativa para carretera a Masaya, mas de 10 calles para el pueblo, mantenimiento de escuelas, la entrega de una ambulancia y la próxima inauguración de la casa materna que lleva el nombre de Nidia Mendoza, entre otras cosas.
Llegó el progreso
Por su lado, María Teresa Sevilla García, habitante del barrio, dijo «antes costaba sacar a las personas porque la calle era un cauce, pero llegó el progreso y la alcaldía de Ticuantepe hizo el adoquinado con el apoyo del gobierno del presidente Daniel Ortega».
Agregó que «antes ningún gobierno nos hizo caso, supuestamente metían el proyecto dentro del presupuesto, pero siempre el presupuesto se acababa y nunca componían la calle, por eso le habíamos puesto la Calle del Olvido, pero ahora hay acceso al barrio».
Entre tanto la compañera Desiré Mendoza manifestó que «la vida del sector ha cambiado totalmente con el adoquinamiento de la calle, antes no entraba abastecimiento porque la correntada afectaba, con dificultad sacábamos a los enfermos, pero ahora todo lo podemos hacer, gracia a Dios, al presidente Daniel y la alcaldesa».