La propietaria y directora de un albergue del oeste de México señalada de incurrir en algunos abusos no puede enfrentar cargos penales por su edad y estado mental, que la hacen «inimputable», informaron el lunes autoridades federales.
El procurador general Jesús Murillo Karam dijo en rueda de prensa que tras un estudio se determinó que Rosa del Carmen Verduzco, de 79 años y fundadora del albergue «La Gran Familia», presenta «síntomas característicos de trastornos de la senilidad».
Murillo dijo que hay varias declaraciones que señalan que Verduzco cometió abusos, en particular golpear a los niños, aunque también aseguró que por su edad se desprende que tenía que pasar mucho tiempo en reposo.
«Mamá Rosa» fue por mucho tiempo admirada y elogiada por dar albergue durante casi 65 años a niños desamparados o hijos de padres pobres que no podían mantenerlos o les costaba trabajo educar. Recibió donaciones de las élites política e intelectual de México y la visitaron presidentes y escritores prestigiosos.
Pero tras el operativo de rescate de los menores la semana pasada, residentes del hogar dijeron a las autoridades que algunos de los empleados los golpeaban y también hubo abusos sexuales, además de que los alimentaban con comida podrida y los encerraban en cuartos de castigo.
Murillo aseguró que ninguno de los señalamientos de apoyo a Verduzco influyeron en la actuación de la Procuraduría para declararla inimputable.
Añadió que también se investiga al notario público que firmaba «contratos», a través de los cuales la mujer decía que podía quedarse con los niños hasta que cumplieran 18 años.
MEXICO (AP)