Tres presuntos miembros del crimen organizado murieron en un enfrentamiento con militares mexicanos durante un operativo de búsqueda del líder del cártel narcotraficante Los Caballeros Templarios en la convulsa región de Michoacán (oeste), informó este martes la fiscalía local. El tiroteo se desató la noche del lunes en Arteaga, el pueblo natal del capo Servando Gómez, «La Tuta», donde se cree que está escondido.
Efectivos de la Marina Armada «realizaban un recorrido por la zona como parte de la intensa búsqueda del líder (de Los Caballeros Templarios) cuando fueron recibidos a balazos», explicó a la AFP una fuente de la fiscalía de Michoacán que pidió el anonimato.
«El saldo del tiroteo fue de tres muertos (…) quienes, al parecer junto con otros empistolados que lograron huir, se enfrentaron con los marinos», indicó la fuente, sin especificar a qué grupo delincuencial pertenecían los fallecidos.
Arteaga, ubicado en la sierra michoacana, es un pueblo de unos 22.000 habitantes feudo tradicional de «La Tuta». Este exmaestro de escuela rural es el último líder visible que tienen los Templarios en libertad, tras el abatimiento en los últimos meses de su fundador Nazario Moreno «El Chayo» y la detención de otros dos importantes capos.
El pasado 21 de junio, Huber Gómez Patiño, un hijo de «La Tuta» de 22 años, fue detenido en Arteaga, en cuyas cuevas los milicianos aseguran que se esconde su padre.
Michoacán es un estado clave para el narcotráfico por sus costas en el Pacífico y su agreste sierra, donde proliferan los laboratorios clandestinos de droga y que se ha convertido en un escondite perfecto para los narcos.
Desde mayo de 2013, el gobierno mexicano mantiene un fuerte operativo militar en Michoacán donde, además de los crímenes de los Caballeros Templarios, también se vivían enfrentamientos entre estos narcotraficantes y grupos de ciudadanos que se organizaron en milicias de autodefensa.
MORELIA, (AFP)
