El Papa Francisco ha decidido apartar provisionalmente de la diócesis de Limburg, Alemania, al obispo Franz-Peter Tebartz-van Elst, de 53 años, a raíz de un escándalo sobre el multimillonario costo de su residencia oficial.
El religioso, también conocido «obispo de lujo» ha sido ampliamente criticado por haber gastado 31 millones de euros para reestructurar la sede del arzobispado, donde se encuentra su residencia privada. Tan sólo por la bañera de su cuarto gastó 15 mil euros.
El obispo fue ordenado a abandonar su diócesis por un período indefinido, tras haberse reunido con el Papa Francisco hace dos días. Así mismo, el Pontífice ha ordenado iniciar una investigación.
El obispo -y sus hábitos de gastar- son considerados infames en Alemania donde el público paga impuestos a la Iglesia Católica. El Papa Francisco ha recalcado la importancia de la humildad y el respeto a los pobres desde su elección en marzo.
Periodista: Jimmy Altamirano