El más joven heredero a la corona británica, el príncipe George, será bautizado en una reservada ceremonia en Londres en contraste con la ostentosa ceremonia de matrimonio de sus padres, en 2011.
El príncipe William y su esposa Catherine, duquesa de Cambridge, invitaron tan solo 22 personas, siete de ellas nombradas padrinos o madrinas.
La ceremonia recibirá al bebé de tres meses a la Iglesia Anglicana, una institución que estará destinado a liderar cuando sea rey.
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