Una nueva ronda de tormentas ha castigado el sur de China, dejando al menos cinco víctimas mortales y miles de afectados, además de provocar importantes pérdidas económicas.
Hasta las 08:00 horas de hoy miércoles, cuatro personas habían perdido la vida y otras dos permanecían en paradero desconocido en el distrito de Shiqian de la ciudad de Tongren, en la provincia suroccidental de Guizhou, según el centro provincial de control de inundaciones.
Las precipitaciones medias en el distrito eran de 261 milímetros entre las 08:00 horas de ayer martes y la misma hora de hoy, y más de 3.300 hectáreas de cereales y 318 viviendas habían resultado dañados por las lluvias torrenciales.
Además, cerca de 208.000 residentes de 14 ciudades y distritos de Guizhou habían sido afectados hasta las 17:00 horas de ayer, de acuerdo con la misma fuente.
En la vecina provincia de Sichuan, un anciano de 70 años de edad del distrito de Tongjiang de la ciudad de Bazhong murió el lunes por la noche por los fuertes golpes que le produjeron las inundaciones en su aldea de montaña.
El departamento de prensa del distrito de Jiang’an de la ciudad de Yibin, en Sichuan, informó hoy de que las fuertes lluvias han afectado a más de 22.000 personas en 12 poblados.
Las tormentas castigaron también el distrito de Fengshan de la región autónoma de la etnia zhuang de Guangxi ayer por la noche, provocando el corte de varias carreteras y el cierre de las escuelas locales.
De acuerdo con cifras de la Comisión Nacional de Reducción de Desastres, al menos 37 personas murieron y otras seis desaparecieron en las anteriores rondas de tormentas que azotaron el sur del país en mayo.
GUIYANG, (Xinhua)
