El rey Juan Carlos de España abdicó sorpresivamente el lunes en favor de su hijo Felipe luego de casi 40 años en el trono, con el objetivo de revivir a una monarquía plagada de escándalos en momentos de dificultades económicas y creciente descontento con la elite política.
«Una nueva generación reclama con justa causa el papel protagonista», dijo Juan Carlos, de 76 años, en televisión, horas después de un sorpresivo anuncio del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy. Juan Carlos, una figura popular que en la década de 1970 ayudó a suavizar la transición a la democracia tras la dictadura de Francisco Franco, perdió apoyo en los últimos años debido a escándalos de corrupción y actuaciones desafortunadas.
El Rey realizó en secreto un lujoso safari para cazar elefantes en Botsuana en el 2012, en momentos en que uno de cada cuatro españoles estaba desocupado y el Gobierno se encontraba al borde del incumplimiento de pagos. La hija menor del Rey, la infanta Cristina, y su yerno Iñaki Urdangarín están siendo investigados en un caso de corrupción. Ambos niegan haber hecho nada errado. Un juez en Palma de Mallorca debe decidir pronto si llevar a juicio a Urdangarín bajo cargos de desviar 6 millones de euros en fondos públicos a través de su organización de beneficencia.
El rey, que camina con un bastón tras someterse a cinco operaciones en apenas dos años y mostró dificultad para hablar durante un importante discurso este año, está abdicando por razones personales, dijo Rajoy. Pero una fuente de la Casa Real dijo a Reuters que las razones eran políticas. La fuente dijo que la decisión fue tomada en enero, pero el Rey retrasó el anuncio hasta después de la elecciones del 25 de mayo en la Unión Europea.
Analistas políticos dicen que el gobernante Partido Popular (PP) quería poner a Felipe en el trono para intentar combatir el creciente sentimiento antimonárquico, luego de que pequeños partidos de izquierda y grupos en contra de la clase dirigente lograran buenos resultados en las elecciones. Los grupos de izquierda Podemos, Izquierda Unida y Equo, que en conjunto alcanzaron el 20 por ciento en el voto europeo, instaron el lunes a la realización de un referéndum sobre la monarquía. La transición seguramente se realice a través de la aprobación de una ley en el Parlamento, donde el PP tiene mayoría absoluta.
MADRID (Reuters)