Una anciana de 93 años de edad perdió la vida en su propia casa, tras recibir al menos tres impactos de bala por parte de un grupo de funcionarios de la policía de Texas (sur de Estados Unidos).
El hecho se registró en la ciudad de Hearne condado de Robertson (Texas), específicamente cuando vecinos de la zona, reportaron a las autoridades que la anciana tenía en su poder un arma de fuego, con la que se presumía podía haber arremetido contra alguien.
De acuerdo con el fiscal de Robertson, Coty Siegert, la víctima identificada como; Pearlie Golden de 93 años de edad, se encontraba sola en su vivienda cuando llegaron los efectivos policiales, quienes en su intento para que bajará el arma abrieron fuego contra ella.
«Los agentes le pidieron que tirara el arma, pero al no recibir una respuesta positiva, dispararon hasta en tres ocasiones contra la anciana», dijo Siegert.
Dio a conocer que el efectivo que disparó a Golden, identificado como Stephen Stem se encuentra suspendido temporalmente, a fin de que las autoridades determinen los indicios del suceso.
Entre tanto, los vecinos de la zona han manifestado su inconformidad por el comportamiento fuera de lugar de los organismos de seguridad del estado de Texas.
Afirmaron que detonar un arma contra una anciana no fue la mejor manera de evitar una tragedia. «Ellos pudieron haber disparado solo para asustarla, no para matarla», aseguraron los lugareños de la pequeña ciudad de Hearne.
En septiembre de 2013, efectivos de la policía de Texas abrieron fuego contra una joven de 23 años, presuntamente por haber violado ciertas reglas de tránsito.
AGENCIAS