Después de 80 años de enamorados una pareja de paraguayos decidieron darse el sí, en una boda religiosa celebrada esta semana.
José Manuel Riella, de 103 años, y Martina López de 99, ambos campesinos, se casaron por lo civil tras 49 años de relación. Pero no ha sido hasta ahora que su amor quedó unido para siempre ante los ojos de la Iglesia Católica.
José Manuel, sentado en su silla de ruedas prometió amor eterno a su amada Martina, quien finalmente pudo lucir un largo vestido blanco, en una ceremonia que tuvo lugar en el jardín de su casa, en un altar construido para la ocasión.
A la boda asistieron sus ocho hijos, 50 nietos, 35 bisnietos y 20 tataranietos ante la mirada atónita del religioso que ofició la ceremonia.
Agencias.