El ministro boliviano de Defensa, Reymi Ferreira, culpó al Gobierno chileno de ser el mayor escollo en el diálogo entre ambas naciones, para solucionar el diferendo sobre la salida al mar.
«En circunstancias normales la diplomacia es un camino, un puente entre los Estados, pero en el caso de Chile se ha convertido en un obstáculo para el diálogo y acercamiento con Bolivia», aseguró Ferreira.
Las declaraciones del ministro ocurren un año después del fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, que se declaró competente para dirimir en la denuncia interpuesta por Bolivia para la cesión de una salida propia al océano Pacífico.
Ferreira criticó a la diplomacia chilena por su incapacidad de «tender puentes» con sus pares bolivianos. Igualmente, resaltó la gestión desplegada por el Gobierno de Evo Morales en la CIJ.
El 24 de septiembre de 2015, el CIJ rechazó la objeción de Chile por 14 votos en contra y dos a favor, y determinó que ese órgano tiene competencia para atender la solicitud de Bolivia.
Sin embargo, el diálogo no ha llegado a consolidarse entre ambas partes. Morales ha insistido en la necesidad de platicar con la presidenta chilena Michelle Bachelet, pero no ha habido resultados positivos.