El doctor Javier Gutiérrez, Director de Cambio Climático del MARENA, fue enfático al asegurar que en el reciente informe de Organización Meteorológica Mundial donde señala que el 2016 será el año más caliente en la historia, avala la posición de Nicaragua en la cumbre de Cambio Climático realizada en París en el 2015.
En la COP21, Nicaragua rechazó que los compromisos para reducir los gases de efectos invernadero fuesen el resultado de un plan voluntario y no una decisión asumida con firmeza por parte de los países más industrializados, los más responsables en el calentamiento global.
Este experto mantuvo que Nicaragua ha dejado muy claro las diferencias grandes de responsabilidades entre las naciones desarrolladas y las naciones en desarrollo.
Dijo que nuestro país insistió en que las naciones industrializadas deberían de indemnizar a países que no han contribuido en la contaminación de la atmósfera con gases de dióxido de carbono y metano y que serán las más afectadas con las altas temperaturas.
El funcionario del MARENA señala que este estudio y otros dan un amplio respaldo a la posición científica de Nicaragua en este contexto mundial.
Ante este calentamiento global que será irreversible si no hay cambio en el 2020, Nicaragua bajo orientación del Presidente de la República, Daniel Ortega, adoptará una posición nacional de adaptación al cambio climático, con acciones que promuevan el cuido del medio ambiente.
Con esto Nicaragua demuestra una disposición total por proteger la salud de la Madre Tierra.