El mercadito campesino que funciona desde hace unos diez años y que está ubicado costado este del casco urbano de la ciudad de Nueva Guinea, ha ido avanzando en cuanto a mejorar su estructura gracias al hermanamiento de Centroide y alcaldía municipal que está al frente de la alcaldesa Claribel Castillo.
El nuevo mercadito ha venido funcionando de manera normal para protagonismo de muchas familias que ahora ya no son solo productoras, sino comerciantes de su propios cultivos.
Muchos de los mismos comerciantes recuerdan primeramente que exponían sus productos frente al juzgado de la localidad, pero al ver la necesidad ya que se daba un congestionamiento vehicular y eran expuestos a accidentes, la alcaldía les destinó parte de un terreno en la antigua pista para hacer un galerón y ubicarlos en dicho lugar, en donde ahora brindan mejores condiciones para que la dinámica comercial en este centro vaya mejorando.
Claribel Castillo en conjunto con los concejales, miembros de Centroide y comerciantes, entregaron la obra a los vendedores quienes antes solo contaban con estructura pero ahora cuentan con una bodega y servicios higiénicos.
Añadió que parte de este trabajo es el resultado de las ferias que se vienen realizando, en donde se da la oportunidad de vender lo que se produce. «En donde podemos ver plátano, malanga, pinol, chicha, pozol, cuajadas. Yo insto a los vendedores que sigan promoviendo esa identidad nicaragüense, en donde también mantengan la higiene porque estoy segura que cada día este mercadito va aumentar su clientela» detalló Castillo.
Mauricio Soza, responsable del hermanamiento de Centroide, dijo que con parte de ese apoyo del país de Bélgica estarán ejecutando proyectos de sistema de protección sobre los sistemas hídricos, protección de los suelos y promover el turismo rural ya que hay condiciones. «Pero falta aun mas visión y por eso estamos uniendo esfuerzos con la alcaldía municipal para echar a andar todo estos proyectos», indicó Soza.
Doña María Dolores, una comerciante del mercadito verde, manifestó que se siente agradecida con dicha obra ejecutada a través del hermanamiento de Centroide y la alcaldía municipal.
También reconoció que el «proceso de traslado de nosotros como vendedores que antes estábamos en la calle, no fue fácil, pero se logró gracias al dialogo y ahora estamos en un lugar que presta las condiciones para la actividad mercantil» detalló.
La obra tiene un costo de 250 mil córdobas.