Washington alcanzará el lunes su objetivo de acoger a 10.000 refugiados de la guerra en Siria a través de un programa de reasentamiento de un año de duración, dijo el domingo la embajadora de Estados Unidos en Jordania, tras reunirse con familias que viajarán a California y Virginia.
El programa se convirtió en un punto de fricción en la campaña por la Casa Blanca. El candidato republicano, Donald Trump, ha dicho que los sirios desplazados son una amenaza potencial a la seguridad.
Alice Wells, embajadora estadounidense en Jordania, se reunió el domingo con tres familias de refugiados antes de su marcha a San Diego, California, y Charlottesville, Virginia. Se da preferencia a las víctimas de violencia, personas con problemas médicos y niños.
Wells dijo que mantener a los estadounidenses seguros y traer algunas de las personas más vulnerables al país no son mutuamente excluyentes.
«Los refugiados están en la categoría de viajeros más examinados al viajar a Estados Unidos, y los refugiados sirios están sujetos incluso a más escrutinio», dijo.
Agregó que la meta para reasentar 10.000 refugiados sirios en Estados Unidos durante el año fiscal 2016 será alcanzada el lunes, mientras cientos de sirios salgan de Jordania en las siguientes 24 horas.
Cerca de cinco millones de sirios huyeron de la guerra civil que asola el país desde el 2011. La mayoría lucha por sobrevivir en duras condiciones en países vecinos.