El gobierno municipal restituye el derecho a la sana recreación de la niñez chinandegana con la inauguración del parque infantil y techado de la cancha del reparto Monserrat de esa ciudad.
La felicidad nuevamente se ve reflejada en los rostros de niños, niñas, adolescentes y jóvenes del reparto Monserrat, gracias a la gestión del Gobierno Sandinista, quien a través de la comuna chinandegana construyó dicho parque.
La obra tiene un costo de 1 millón 880 mil córdobas, cuenta con 15 juegos infantiles, techado de la ancha con su sistema eléctrico, columnas cerchas metálicas, iluminación, agua potable, malla perimetral, más de 180 metros de andén y áreas de descanso para los más adultos.
La comunidad está satisfecha con el trabajo que viene realizando la comuna. Estamos convencidos que este Gobierno ha venido desarrollando obras importantes en beneficio de la población. Cuando vine a este lugar solo habían unas cuantas casas y un parque abandonado, habitado por bebedores consuetudinarios, huele pegas y drogadictos, manifestó Ángel Martínez, poblador.
Esta obra es una bendición porque nadie esperaba que de un momento a otro, esté lugar fuera a ser reestructurado. Nadie quería venir porque solo vagos se mantenían y representaban un peligro para los más pequeños. Ahora se respira un ambiente de cambiado, seguro y tranquilo para disfrutarlo en familia, aseguró Tania Parado, ama de casa.
Axel Espinoza dijo que gozar de un lugar de diversión cerca de su casa es un sueño hecho realidad. esperamos que la población tome conciencia y cuidemos este hermoso lugar donde quedarán los recuerdos de nuestra infancia. Quiero decirle a los demás niños que no dañemos los chinos y los demás juegos porque es importante que tengamos un lugar adecuado para la recreación.
A sus 13 años, Noelia Acosta no tenía un lugar adecuado para recrearse por la inseguridad que representaba el único sitio donde podía jugar junto a los demás niños y niñas del reparto Monserrat, ahora la niñez, adolescencia y hasta el adulto mayor puede venir a recrearse. El lugar está ambientado y arborizado para pasar la tarde, leer un libro y cuidar a los hijos, aseguró.
Ahora los chavalos y chavalas cuentan con un lugar seguro, saludable y de esparcimiento para el disfrute de todas las familias del reparto Monserrat.