El líder de los socialistas Pedro Sánchez dijo el miércoles que su partido no apoyará los intentos del presidente en funciones Mariano Rajoy para formar un gobierno, una decisión que podría obligar a España a tener una tercera ronda de elecciones.
Después de reunirse con Rajoy, Sánchez dijo que «al día de hoy», el Partido Popular de Rajoy no tiene respaldo. «El señor Rajoy no puede contar con el PSOE para un gobierno de gran coalición ni para pactar un programa de legislatura», agregó el líder del Partido Socialista Obrero Español.
El encuentro fue el último de una primera ronda de contactos por parte de Rajoy mientras busca apoyo para formar un nuevo gobierno en España. Las elecciones generales del 26 junio, las segundas en seis meses, volvieron a ofrecer un resultado inconcluyente.
El PP fue el partido más votado en junio, con 137 escaños, pero aunque su margen con los demás partidos fue mayor que en los comicios de diciembre, volvió a quedarse por debajo de la mayoría parlamentaria en el Congreso de 350 escaños.
El segundo más votado, con 85 parlamentarios, fue el PSOE.
El tercero más votado fue la coalición de izquierda Unidos Podemos, con 71 escaños, pero también se opone a Rajoy; mientras que Ciudadanos, un partido afín al sector empresarial con 32 diputados, indicó que estaba dispuesto a abstenerse en una segunda votación.
Rajoy ha dicho que una tercera elección sería «una locura» y que España necesita un gobierno sólido pronto. Dijo que seguirá tratando de formar un gobierno.
La legislación española contempla un proceso de investidura con dos votaciones. En la primera, el candidato requiere tener una mayoría absoluta de 176 votos para formar gobierno. En la segunda bastaría una mayoría simple.
Los legisladores recién electos deben asumir sus cargos el 19 de julio, después de lo cual el rey Felipe VI consultará con los líderes de los partidos y posiblemente nominará a uno para que trate de formar un gobierno.
El líder designado por el rey necesitará el respaldo de la mayoría de los diputados en la primera votación parlamentaria o más votos a favor que en contra en la segunda votación.
Después de la elección de diciembre, Rajoy renunció a la oportunidad de siquiera tratar de formar un gobierno debido a que no tuvo apoyo de los otros partidos. Sánchez, por su parte, tampoco fue capaz de reunir el apoyo suficiente.