En dos años Colombia duplicó el territorio sembrado con hojas de coca y es el país del mundo con mayor producción de cocaína, informó el viernes la Organización de las Naciones Unidas.
«Es el primer país de sembrados de coca. Y digo más, Colombia excede a Perú y Bolivia juntos, produce más que los dos juntos», aseguró a The Associated Press Bo Mathiasen, representante de la Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito.
Según el informe de la ONU presentado en Bogotá, hasta 2015 en el país había sembradas 96.000 hectáreas de hojas de coca, lo que implica un incremento de 39% sobre las hectáreas detectadas en 2014.
De acuerdo con Mathiasen, Colombia es también el mayor productor mundial de cocaína. Para 2015, dijo, la producción alcanzó 646 toneladas métricas.
«Los resultados que estamos presentando hoy (viernes) son preocupantes. Las economías ilegales, como el cultivo de coca, son amenazas para la construcción de paz», enfatizó el funcionario de la ONU durante la presentación del informe a la prensa.
Mathiasen llamó la atención sobre la situación del empobrecido puerto de Tumaco, en el Pacífico colombiano. Allí están sembradas entre 17% y 18% de las hectáreas de hojas de coca del país. Es «una situación alarmante que requiere atención inmediata».
Eduardo Díaz, director del programa de lucha contra las drogas del gobierno nacional, observó que el informe «es preocupante porque había una tendencia clara al descenso».
En tanto Carlos Romero, gobernador del departamento de Nariño, donde está ubicado Tumaco, comentó a AP que «más que una mirada criminal hay que tener una mirada social frente al tema de los cultivos ilícitos». El mandatario regional observó que miles de familias en Nariño viven de los cultivos ilícitos. Se calcula, comentó, que es una familia por cada hectárea sembrada.
El mayor aumento en los sembradíos ilegales se observó en los departamentos de Nariño, Putumayo, Norte de Santander, Cauca y Caquetá.
El informe de 2015 de la Oficina para el Control de Drogas de las Naciones Unidas en Colombia (UNODC) había revelado un aumento considerable de las hectáreas sembradas al pasar de 48.000 en 2013 a 69.000 en 2014.
De acuerdo con la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA, por su sigla en inglés), entre 2007 y 2012 los sembradíos de hojas de coca en Colombia se habían reducido ostensiblemente gracias a los programas de erradicación manual y a la fumigación aérea. La misma entidad estadounidense dijo que, sin embargo, en 2014 y 2015 hubo un incremento.
El cultivo de la hoja de coca es uno de los problemas que más afecta a esta nación sudamericana y es también uno de los ingredientes del conflicto armado interno.
Desde fines de 2012, el gobierno del presidente Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) adelantan en Cuba un proceso de paz para tratar de poner fin a más de medio siglo de hostilidades entre las partes.
Uno de los puntos ya acordados en la mesa de negociación es el referente a la lucha conjunta contra el narcotráfico. El mencionado grupo rebelde, aunque lo ha negado en reiteradas oportunidades, es considerado una organización narcotraficante.