La fiscal argentina Verónica Andrade imputó este lunes al empresario Mariano Martínez Rojas en la ciudad de Buenos Aires por los delitos de usurpación y daños por los destrozos ocurridos esta madrugada en el edificio donde funcionan el diario Tiempo Argentino y Radio América.
Rojas fue imputado junto a otras diez personas que lo acompañaron durante el ataque. Estos serán indagados en 48 horas.
La denuncia fue realizada por los trabajadores de la cooperativa Por Más Tiempo, después que fueron echados a la fuerza del edificio ubicado en Amenábar 23, al que recién pudieron volver a ingresar a las cinco de la madrugada, cuando todo ya había quedado destrozado.
El director del diario argentino, Gustavo Cirelli, denunció «la patota que entró y destrozó el edificio está ahora en su casa, hacemos responsable al Estado Nacional».
Por su parte, fuentes judiciales indicaron que «a las 3 de la mañana, cuando algunos periodistas de Tiempo Argentino comenzaron a llegar al diario, se encontraron con Martínez Rojas y su grupo. Allí se produjo un altercado. La fiscal Andrade ordenó a la policía a que desalojaran del diario a Martínez Rojas y a su grupo».
Las fuentes del Ministerio Público Fiscal porteño señalaron que «Andrade les aseguró a los periodistas del diario que podían continuar con su actividad y les colocó seguridad policial. También le solicitó al canal C5N las imágenes de los daños que produjeron el grupo de Martínez Rojas».
El empresario de la Provincia de Corrientes dijo haber comprado el diario y la radio tras el vaciamiento y abandono de los empleados del Grupo 23 por parte de Sergio Szpolski y Matías Garfunkel. Además, los trabajadores denunciaron complicidad policial con los atacantes.
El delito de usurpación tiene previsto en el Código Penal de Argentina una pena de prisión entre seis meses a tres años, mientras que para el delito de daños el castigo es de 15 meses a un año de cárcel para el «que destruyere, inutilizare, hiciere desaparecer o de cualquier modo dañare una cosa mueble o inmueble o un animal, total o parcialmente ajeno».
