La recién coronada Miss USA es una oficial del ejército de 26 años procedente del distrito de Columbia que ofreció tal vez la respuesta más contundente de la noche al ser preguntada por las mujeres en combate.
«Como mujer en el Ejército de Estados Unidos, creo (…) que somos tan duras como los hombres. Como comandante de mi unidad, tengo fuerza, estoy entregada», dijo Deshauna Barber. «El género no nos limita en los Estados Unidos».
Como ganadora del concurso Miss USA 2016, celebrado el domingo en el T-Mobile Arena de la Strip de Las Vegas, Barber participará ahora en la competencia de Miss Universo.
Barber es la primer miembro del ejército estadounidense que gana Miss USA. En una conferencia de prensa tras el concurso, la teniente de 26 años de Northeast DC dijo que tiene previsto tomarse un descanso de la Reserva del cuerpo y que ya había hablado con sus superiores sobre la posibilidad pasar a la inactividad durante un par de años si se hacía con la corona. Actualmente sirve dos días al mes, explicó.
«Mi comandante debe estar viéndome ahora», dijo Barber. «Dos días al mes no es servicio en activo. Es una obligación a la que me apunté pero en la Reserva del Ejército de Estados Unidos son muy flexibles».
Barber tiene previsto emplear la popularidad que le da el triunfo para apoyar causas en favor de los veteranos de guerra y abordar el problema del suicidio y el estrés postraumático entre los militares. Preguntada por el mensaje que tenía para los candidatos presenciales entre el ellos el expropietario de la competencia y más que probable aspirante republicano, Donald Trump Barber explicó que deberían centrarse más en los asuntos relacionados con los veteranos, incluyendo las demoras en sus hospitales.
«Creo que hay muchos temas que discuten que no son tan importantes», manifestó enfundada en un brillante vestido dorado.
Deshauna Barber no es la única que tuvo que pronunciarse sobre el posible candidato del Partido Republicano, que se separó de forma poco amistosa de la organización del evento el año pasado.
La segunda clasificada, Miss Hawaii, enfrentó un momento complicado en la parte de preguntas al ser cuestionada por su elección entre los probables candidatos a la presidencia del país, la demócrata Hillary Clinton o Trump.
Chelsea Hardin reconoció que no había una respuesta correcta. La pregunta planteaba la posibilidad de que Clinton se convierta en la primera mujer candidata a la Casa Blanca por uno de los grandes partidos. La estudiante universitaria de 24 años de Honolulu dijo simplemente que el nuevo presidente debería luchar por lo que es correcto para el país.
Al resto de las aspirantes que quedaron entre las cinco primeras clasificadas se les preguntó por el derecho al voto, la desigualdad salarial y la reciente muerte del icónico boxeador Muhammad Ali.
La favorita de los seguidores de la competencia, Miss California, Nadia Grace Mejia, tropezó y se tomó una pausa para responder una pregunta sobre la desigualdad social y salarial. La modelo de 20 años, hija de un cantante de la década de 1990 conocido por el tema «Rico Suave», había hablado también acerca de sufrir anorexia y de su deseo de promover la confianza en el cuerpo antes en el programa.
La cadena Fox emitió el concurso que duró tres horas. La última edición pudo verse en el canal por cable Reelz.
La organización del concurso de belleza se está recuperando de una serie de polémicas el año pasado, incluida la ruptura con su anterior dueño, el empresario Donald Trump, y el error en la coronación de Miss Universo.