Las doctoras que son madres del Hospital Bertha Calderon compartieron esta mañana de lunes las experiencias entre su labor de ser médico y su relación con sus hijos, por el poco tiempo que les dedican.
El doctor Erick Bonilla, subdirector de ese hospital, manifestó que de 215 médicos, el 60 por ciento son mujeres y asegura que son muy trabajadoras, responsables y sus hijos han sido el motor para brindar una buena atención a sus pacientes.
Para la doctora residente, Fátima Mejía, le fue aún más difícil porque es originaria de Bluefields y debió dejar a sus hijos allá mientras ella se acomodaba en la capital y ahora que los tiene junto a ella trata de darles mayor tiempo y de calidad.
María de los Angeles Narváez es otra de las doctoras del Bertha Calderon que tiene hijos y por los horarios asegura que la medicina es una carrera muy cansada pero «vale la pena». Es gratificante al final sostuvo.
En esta actividad compartieron un video donde los niños quieren una mamá perfecta y a las doctoras les sacó lágrimas porque los niños piden estar más tiempo con sus mamás.
De esta forma compartieron la vida de una doctora con hijos que deben aprender a organizar su tiempo tanto para la familia como a sus pacientes en el hospital.
La labor de ser médico en Nicaragua y en todas partes del mundo es una tarea que exige mucha dedicación y vocación, por ello es que las madres que trabajan en esto saben que tienen que hacer un sacrificio, pero que al final están cuidando de la salud de todos nosotros.