La jornada de votación en la República Dominicana transcurre con una alta participación, según la Junta Central Electoral (JCE) que destacó la tranquilidad del proceso pese a algunos incidentes en los que se usaron armas de fuego.
A las elecciones están convocados 6.765.136 votantes, incluyendo los dominicanos que residen en el exterior, habilitados para elegir al próximo presidente del país y a su vicepresidente, así como a 3.842 puestos municipales, 262 congresales y los 20 diputados y sus suplentes al Parlamento Centroamericano (Parlacen)
«Los dominicanos están acudiendo masivamente a votar«, dijo el presidente de la JCE, Roberto Rosario, en rueda de prensa, en la que tildó de «grandiosa» la participación de los dominicanos en el exterior, especialmente, en Europa y Estados Unidos.
A pesar del retraso en la apertura de las votaciones en algunos colegios electorales, debido a problemas técnicos, el funcionario señaló que al mediodía el 74% de los centros ya estaban funcionando con los nuevos equipos de registro de huella, instalados para estas elecciones, en los que los sufragios serán contados por primera vez manual y electrónicamente.
Rosario destacó el comportamiento de los votantes y de la JCE, y llamó a los partidos políticos a imitar estas acciones.
Aunque la jornada transcurre sin mayores inconvenientes, el funcionario confirmó un incidente en Dajabón (noroeste), donde se registró un tiroteo entre seguidores de la actual senadora de esa provincia Sonia Mateo, y del director del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi), Olgo Fernández, ambos del oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Rosario dijo que se comunicará con el secretario general del PLD, el también senador Reinaldo Pared Pérez, para que casos como este no vuelvan a ocurrir durante el proceso.
El presidente de la JCE también informó que en la provincia Barahona (suroeste) tres personas fueron detenidas tras encontrarse en el vehículo en que se desplazaban tres armas de fuego y dinero en efectivo.
Por último, subrayó que la JCE «es una caja de cristal» en la que «no hay nada oculto».
«Todo está para que se vea y se comparta, no se niega ninguna información, pero tampoco se deja de dar respuesta a ningún reclamo», afirmó.