La Federación Egipcia de Agencias de Turismo pagó 140.000 dólares como compensación financiera a cada una de las familias de tres de los ocho turistas mexicanos abatidos en 2015 por el ejército egipcio, que los bombardeó «por error», indicó el lunes uno de sus responsables.
El portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores, Ahmed Abou Zeid, confirmó el lunes el acuerdo al que llegaron la organización no gubernamental y las tres familias, sin precisar, sin embargo, el monto de las indemnizaciones.
«Las familias de las tres víctimas se han beneficiado, cada una, de un giro bancario de 140.000 dólares a cambio de que abandonen todo procedimiento judicial», dijo a la AFP Ahmed Ibrahim, tesorero de la Federación Egipcia de Agencias de Viaje y de Turismo.
Ibrahim precisó que el abogado de las tres familias firmó el acuerdo la semana pasada.
Los ocho turistas y sus cuatro acompañantes egipcios perecieron el 13 de septiembre de 2015 cuando aviones de combate o helicópteros bombardearon sus vehículos a 250 kilómetros al suroeste de El Cairo, en un extenso desierto occidental muy visitado por los turistas. El bombardeo duró tres horas, según una de las turistas rescatadas.
El gobierno egipcio, parco en sus explicaciones sobre las circunstancias y las causas del suceso, afirmó que el ejército bombardeó al grupo «por error», mientras buscaba a «terroristas» yihadistas.
Las autoridades culparon a los organizadores egipcios de la excursión por lo sucedido, explicando que los acompañantes de los turistas les llevaron a almorzar a una «zona prohibida».
«Se están llevando a cabo diálogos con las otras cinco familias para concluir definitivamente el caso», agregó Ibrahim, precisando que la Federación había tomado esta iniciativa después de que la investigación probara que la agencia de turismo era la responsable de lo ocurrido.
«En calidad de Federación de Agencias de Turismo, hemos decidido pagar nosotros las compensaciones, y no el gobierno egipcio», insistió.
A principios de enero, la ministra mexicana de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu, señaló que el ministerio de Turismo egipcio «encontró que son las autoridades administrativas y la agencia de viajes quienes debieron haber tenido una mayor claridad en el permiso y en ese sentido serían eventualmente las responsables».