Los votantes españoles volverán a las urnas en junio, en una reedición de las elecciones no concluyentes de diciembre, después de que la ronda final de conversaciones entre el rey y los partidos políticos no logró un acuerdo para formar una coalición de gobierno el martes.
Reconociendo el fracaso de los partidos para romper el estancamiento político generado más de cuatro meses atrás, en el resultado electoral más fragmentado en décadas, el rey Felipe dijo que no propondrá ningún candidato nuevo para presidente, allanando el camino para unos nuevos comicios el 26 de junio.
En la votación de diciembre el gobernante PP del presidente interino, Mariano Rajoy, obtuvo 123 de los 350 escaños del Congreso de los Diputados, por 90 de los socialistas, 69 del antiausteridad Podemos y 40 del liberal Ciudadanos.
Los líderes de los partidos se culparon unos a otros el martes por la incapacidad para alcanzar un pacto, una situación que podría empezar a afectar de forma más notoria a la quinta economía de la Unión Europea si se prolonga varios meses más la ausencia de gobierno.
«El PP, al día siguiente de las elecciones, hizo una propuesta de coalición. Creíamos que lo mejor, a la vista de los resultados electorales, era un acuerdo con el PSOE», comentó Rajoy a los periodistas tras reunirse con el rey. Sin embargo, indicó que «el PSOE no quiso hablar»
El líder socialista, Pedro Sánchez, dijo que tanto Rajoy como el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, fueron los principales responsables de la primera repetición de unas elecciones en la historia española moderna. «El señor Iglesias nunca quiso pactar con el Partido Socialista. No puedo hacer frente al bloqueo de Rajoy e Iglesias», señaló.