Médicos del servicio de enfermedades infecciosas y sida del Hospital Clínic han alertado que, en Barcelona, se están celebrando encuentros denominados ruletas sexuales, a los que se invita a un infectado por el VIH, el virus que causa el sida, con el fin de hacer más estimulante la experiencia.
Los especialistas, entre los que figura el doctor Josep Mallolas, adjunto en el citado servicio, advierten de que «se ha perdido el respeto» a una enfermedad que, bien tratada, no resulta mortal, ya que se puede sobrellevar de forma crónica, pero que es incurable y muy peligrosa.
Estos encuentros, informa la Cadena Ser, consisten en grupos –habitualmente hombres homosexuales– que se citan en un local con el objetivo de celebrar una orgía o mantener relaciones sexuales colectivas, incluyendo al invitado que sufre el sida pero sin revelar a los participantes cuál de ellos es el individuo enfermo. «A quien le toca, le toca«.
Las ruletas sexuales tienen diversos formatos. Unas son exclusivas para portadores del VIH, y otras a las que pueden acceder también personas sanas. «Hay de todo: fiestas que son auténticas ruletas sexuales, o encuentros a los que no puedes acudir si no estás ya infectado por el VIH».
La enfermedad sigue siendo mortal en los países donde la población no dispone de sistema sanitario financiado públicamente, pero es evidente, añadió Mallolas, que aquí ya no se la teme.
Crecen las infecciones de hepatitis c, gonorrea, sífilis y clamidias
El especialista ha relatado a la emisora el comentario que le hizo un homosexual de 22 años: «Me dijo, mi sexualidad es importantísima y no me quiero resignar, a los 22 años, a vivir el resto de mi vida con un preservativo puesto. ¿Que alternativa tengo?: Infectarme. Y cuanto antes me infecte y antes me trate y mantenga una carga viral indetectable, antes dejaré de sufrir por si me infecto», ha explicado. «Cuando me lo dijo, me quedé helado», ha añadido el médico.
La terapia antirretroviral que debe seguir un infectado por el VIH cuesta a la Conselleria de Salut unos 7.000 euros al año, más los fármacos que el paciente necesita para eliminar otras infecciones ocasionales, frecuentes en estas personas. El colectivo homosexual sigue siendo el único que experimenta un constante incremento en las cifras de nuevos infectados, indica Salut.
Actualmente el Clínico se trata a 4.500 pacientes por VIH y cada día se atiende a un centenar de visitas. Los retrovirales son cada vez mejores y la supervivencia más alta. Se estima que la expectativa de vida de alguien infectado por sida está 10 años por debajo del resto de la población.
Pero no es sólo el Sida el problema. Las fiestas sexuales desenfrenadas, sobre todo entre gays, han causado un incremento de las infecciones agudas por hepatitis C.
También han aumentado los casos de viejas enfermedades como la gonorrea, la sífilis o clamidias.