El precandidato republicano Ted Cruz manifestó el martes que la vigilancia en vecindarios musulmanes en Estados Unidos debe intensificarse tras los atentados en el aeropuerto y el metro de Bruselas. Cruz dijo que Estados Unidos debería detener el flujo de refugiados de países en los que el grupo Estado Islámico tiene una fuerte presencia.
El grupo extremista se atribuyó los ataques en la capital de Bélgica del martes que mataron a 30 personas e hirieron a muchas más.
«Necesitamos autorizar a las fuerzas del orden para que patrullen y tomen control de los vecindarios musulmanes antes de que se radicalizen», indicó el senador de Texas en un comunicado.
El Consejo de Relaciones Estadounidense-Islámicas, la organización de derechos civiles y apoyo a los musulmanes más grande del país, condenó la petición de más vigilancia hecha por Ted Cruz, y argumentó que envía «un mensaje alarmante a musulmanes estadounidenses que cada vez más temen por su futuro en esta nación y a todos los estadounidenses que valoran la Constitución y las libertades religiosas».
Donald Trump, que conversó con Fox News al mismo tiempo que los acontecimientos en Bruselas se desarrollaban, dijo que él había advertido sobre tales ataques.
«Bruselas era una bella ciudad, un bello lugar sin crimen, y ahora es la ciudad es un desastre. Un desastre total», afirmó.
En diciembre, luego de los ataques en París y San Bernardino, California, Trump hizo un llamado a una prohibición temporal y condicional de ingreso de musulmanes a Estados Unidos. Describió a Bruselas como un «infierno» debido a sus elementos radicales y su relación con los ataques en París.
Tanto Cruz como la precandidata demócrata Hillary Clinton criticaron a Trump el lunes por decir que la OTAN «nos está costando una fortuna» y que Estados Unidos debería reducir su papel en los próximos años. Cruz indicó que la sugerencia de desafiliarse de la OTAN es una «rendición preventiva».
En entrevista con CNN, Clinton llamó a la OTAN «la mejor alianza de defensa internacional, creo yo, siempre». La ex secretaria de Estado reiteró su postura de que el gobierno estadounidense debería acoger, en lugar de alejar, a las comunidades musulmanas, y agregó que «queremos que ellos lo reporten; queremos que ellos sean parte activa en la protección de Estados Unidos».