Por orientaciones del Presidente de la República, Daniel Ortega, el Ejército de Nicaragua anuncia que extreman medidas de seguridad en el transporte acuático.
Tras el naufragio en el Caribe Sur donde murieron 13 hermanos costarricenses, uno está desaparecido, esta institución castrense a través de la Fuerza Naval, de manera estricta, exigirá a las embarcaciones una serie de normativas contempladas en la Ley General de Transporte Acuático para poder navegar.
¨Autorización, despacho, y zarpe emitido por la Fuerza Naval, sondeo de la embarcación, la existencia de chalecos individuales y colectivos en buen estado, medios de comunicación en pleno funcionamiento, medios técnicos de ayuda a la navegación, medios de señalización para el aviso de emergencias, medios de control de averías, medios de lucha contra incendio, carga y pasajeros de conformidad a las capacidades que con registro de la Dirección General de Transporte Acuático cada embarcación tiene autorizado¨, leyó el Jefe de Relaciones Pública del Ejército, Coronel Manuel Guevara.
En el comunicado emitido por estas autoridades detallan que la tragedia fue provocada por la acción temeraria del ciudadano, Hilario Blandón, patrón de la lancha, quien violentó la ley de Transporte Acuático, al salir de un lugar no habilitado, sin la autorización, zarpe y sondeo de la embarcación, evadiendo deliberadamente los procedimientos y controles establecidos en los muelles y atracaderos autorizados.
Las medidas de seguridad se extreman para evitar la pérdida de vidas y lesiones a los usuarios que realicen viaje vía marítima.
