De acuerdo con La Jornada, en una diligencia actuarial, Guzmán Loera señaló a Héctor Carlos López Fuentes, del juzgado décimo de distrito en materia de amparo, con sede en la ciudad de México, que en el penal las autoridades no lo dejan dormir, y que afuera de su celda hay un perro que ladra mucho.
El representante del juzgado se presentó en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 1, Altiplano, para saber de cómo se se encuentra "El Chapo".
Según, el informe actuarial elaborado el 16 de enero, buscaba certificar, particularmente, si el capo se encuentra en condiciones de incomunicación.
En la diligencia, el actuario certificó si Guzmán Loera era objeto de incomunicación o si había tenido comunicación con sus familiares y abogados, y como resultado asentó en escrito: "Manifestándome que desde el día que le notificaron lo de la extradición no ha visto a su abogado; y a su familia desde días antes de ser detenido".
"El Chapo" asentó en el acta judicial: "Manifiesto que del día de ayer a la fecha 16 de enero no he podido dormir, ya que me levantan a pasar lista en el día cada hora y en la noche cada dos horas y hay un perro al lado que ladra mucho y también me espanta el sueño".
Cabe destacar que las autoridades federales no se arriesgan a una nueva fuga de Guzmán Loera, por lo que han implementado severas medidas de seguridad y vigilancia.
También, tratan de evitar que sea envenenado o bien quiera suicidarse