Miles de médicos de categoría menor fueron a huelga el martes en Inglaterra en una disputa por salarios y condiciones de trabajo, el primer paro de este tipo en 40 años.
Unos 50.000 médicos de categoría junior los que están en formación y tienen entre uno y 10 años de experiencia convocaron una huelga de 24 horas en protesta por los planes del gobierno de cambiar sus salarios y turnos de trabajo.
Los huelguistas alegan que las propuestas del gobierno pondrán en peligro a los pacientes, mientras que el gobierno afirma que el Servicio Nacional de Salud (NHS) debe ser más flexible para ofrecer servicios los fines de semana.
La huelga forzó la cancelación de unas 4.000 operaciones y procedimientos médicos con pacientes no ingresados.
El primer ministro David Cameron pidió el lunes a los médicos que cancelaran la convocatoria y el secretario de Salud Jeremy Hunt llamó a los miembros del gremio a regresar a la mesa de negociaciones para nuevas charlas con el gobierno.
La salud pública está considerada como una institución valiosa en el país, y disfruta de un amplio apoyo público pese a los problemas existentes.
El gobierno británico ha insistido en que el servicio público ha permanecido aislado de los recortes en otras agencias del gobierno dentro de las medidas de austeridad para controlar el presupuesto, golpeado por la crisis financiera de 2008. Pero ante el alza de los costes médicos, Londres insiste en que hace falta hacer cambios, especialmente en los turnos de fin de semana.
Con pancartas que decían «Hay que salvar el NHS y ellos no nos escuchan, pero tenemos algo que decir», los manifestantes formaron piquetes en las afueras de hospitales desde temprano en la mañana.
Nadia Masood, de 34 años y organizadora de un mitin en el Great Ormond Street Hospital, acusó al gobierno de no negociar de buena fe con empleados del sector público. Masood dijo que el respaldo a la huelga entre los médicos es abrumador.
«No es la primera vez que hemos sido maltratados por el gobierno y eso te indica lo malos que son estos cambios», dijo.
Cantantes entontaron su apoyo a los huelguistas y taxistas sonaron sus bocinas en respaldo.