Un total de 211 militantes de extrema derecha que incendiaron vehículos y rompieron vitrinas en Leipzig, este de Alemania, fueron detenidos en la noche del lunes. La información la brindó el martes la policía local.
Cinco miembros de las fuerzas de seguridad fueron levemente heridos durante los incidentes, agregó la fuente.
Los incidentes tuvieron lugar en barrio de Connewitz, un bastión de izquierda, mientras en otra zona de la ciudad miles de partidarios del movimiento Pegida (Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente) manifestaban en calma.
Los vándalos rompieron vidrieras con piedras, lanzaron petardos, quemaron vehículos y botes de basura.
Por su parte, en reacción, militantes de izquierda quemaron uno de los autobuses en los cuales habían llegado al barrio, indicó la policía, que contabilizó 57 infracciones a la ley.
Por otra parte, se supo el martes que siete policías resultaron heridos el domingo pasado en enfrentamientos entre militantes de extrema derecha y policías en Potsdam, en la región de Brandeburgo, este del país.
En 2015, en relación con la llegada masiva de solicitantes de asilo, Alemania registró un número récord de delitos y crímenes atribuidos a militantes de extrema derecha.
Desde el comienzo de 2016, tras conocerse los incidentes de la Nochevieja en la ciudad de Colonia, donde centenas de mujeres fueron agredidas por hombres de origen extranjero, se multiplicaron las manifestaciones antimigrantes y las agresiones contra extranjeros.