Un mono macaco que hizo una famosa foto no puede considerarse propietario de los derechos de autor de las fotografías, declaró un juez federal de Estados Unidos.
«Si bien el Congreso y el presidente pueden extender la protección de la ley a los animales además de a los humanos, no hay indicios de que lo hicieran en la ley de Derechos de Autor«, indicó el miércoles en un veredicto preliminar en un tribunal federal de San Francisco el juez de distrito William Orrick.
La demanda presentada el año pasado por el grupo People for the Ethical Treatment of Animals (PETA) pedía una orden judicial que permitiera a la organización representar al mono y permitirle gestionar todos los beneficios de las fotos en interés del mono, identificado como Naruto, de seis años, y de otros macacos negros crestados que viven en una reserva en la isla indonesia de Sulawesi.
Las fotos se tomaron durante un viaje a Silawesi en 2011 en una cámara que había dejado sin supervisión el fotógrafo británico de naturaleza David Slater, que pidió al tribunal que desestimara el caso. Slater señaló que los derechos de autor registrados por su empresa, Wildlife Personalities Ltd., deberían respetarse en todo el mundo.
PETA demandó a Slater y a su empresa de autoedición con sede en San Francisco Blurb, que publicó un libro llamado «Wildlife Personalities» que incluye las imágenes del mono.
Las fotos han sido muy difundidas en distintos medios, como Wikipedia, que alega que nadie tiene el derecho de autor de las imágenes porque las tomó un animal y no una persona.
En documentos judiciales, Slater se describió como fotógrafo de naturaleza con una profunda preocupación por el bienestar de los animales, y dijo que debía ser el Congreso de Estados Unidos, y no un tribunal federal, quien decidiera si la ley de derechos de autor se aplica a animales aparte de los humanos.
Jeff Kerr, asesor legal de PETA, dijo que la organización seguirá luchando por los derechos del mono.
«Pese a este revés, hoy se hizo historia legal porque alegamos ante un tribunal federal por qué Naruto debe ser el propietario de los derechos de autor, en lugar de verse él mismo como un pedazo de propiedad», dio Kerr. «Este caso también muestra la hipocresía de aquellos que explotan animales para su propio beneficio».