Activistas defensores de inmigrantes hispanos en Estados Unidos expresaron el domingo su preocupación porque las autoridades de inmigración parecen haber comenzado una serie de redadas que ha sembrado la alarma entre los inmigrantes. Las denuncias han ido aumentado con el pasar de los días.
Inmigrantes latinos comenzaron a llamar el sábado pidiendo ayuda luego que el diario Mundo Hispánico reportara que las autoridades habían detenido a cinco familias en el área de Atlanta, Georgia, dijo Kica Matos, representante de la red Movimiento para una reforma Migratoria Justa, que agrupa a 45 organizaciones en 35 estados.
Matos dijo que organizaciones pro inmigrantes habían confirmado el artículo del diario con sede en Atlanta. Entre los detenidos estaban una mujer hondureña y su hijo de nueve años, señaló el diario.
Muchos inmigrantes de varias partes del país llamaron el sábado a los dos número gratuitos instalados por activistas, pidiendo asesoría legal e información sobre cómo protegerse, agregó Matos. Uno de los teléfonos llegó a recibir entre cuatro y cinco llamadas por hora.
«El Departamento de Seguridad Nacional ha comenzado sus redadas en Georgia, entrando a la casa de la gente muy temprano y llevándoselos. Muchos de los detenidos fueron mujeres y niños. Así, estas redadas han creado terror y pánico en las comunidades inmigrantes de todo el país», dijo Matos. «La gente está aterrorizada».
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE por sus siglas en inglés) no confirmó ningún operativo pero dijo que seguirá enfocándose en personas que «representan amenazas a la seguridad nacional, seguridad pública y seguridad fronteriza».
«Tal como ha dicho el secretario de Defensa (Jeh) Johnson de manera consistente, nuestra frontera no está abierta para la inmigración ilegal» dijo la portavoz del ICE Virginia Kice, señalando que las personas que «no son aptas para asilo ni otros tipos de alivio, y tienen órdenes finales de deportación, serán deportadas conforme nuestras leyes y valores».
Las redadas se produjeron después de que el Washington Post informara en la víspera de la Nochebuena sobre el presunto plan del ICE, que estaría enfocado en familias centroamericanas con órdenes de deportación a partir de enero del 2016.
«En esta temporada en que la mayoría de estadounidenses celebra el comienzo del Año Nuevo, las familias inmigrantes de todo el país se estaban preparando para las redadas del ICE, haciendo planes de contingencia como nombrar a un guardián para sus niños y preparar un testamento», añadió Matos.
Funcionarios de Seguridad Nacional han dicho que la deportación de familias centroamericanas con órdenes de deportación forma parte de su esfuerzo general para combatir el aumento de familias y personas que llegan a la frontera entre México y Estados Unidos.
Los activistas han pedido a Obama que cancele las redadas porque dicen que enviar de regreso a su vecindario a inmigrantes que escapan de las violentas pandillas centroamericanas equivale en muchos casos a una sentencia de muerte, dado que pandilleros matarían a los deportados por haber huido.
Las redadas también son contraproducentes porque muchos de estos centroamericanos con órdenes de deportación podrían reabrir sus casos si tuvieran ayuda legal, según abogados de inmigración.