Autoridades de Brasil recuperaron un cargamento de armas y municiones bolivianas que asaltantes brasileños robaron de un puesto militar fronterizo la semana pasada.
Los asaltantes fueron detenidos el jueves en la noche en territorio brasileño y se ha recuperado las armas que serán devueltas a Bolivia, dijo el viernes en rueda de prensa el embajador de Brasil, Raymundo Santos Rocha.
Cinco asaltantes, cuatro brasileños y un boliviano, ligados supuestamente a narcotraficantes sorprendieron a militares navales de Bolivia la semana pasada, los redujeron y se llevaron 11 fusiles AK-47, tres pistolas y cajas de munición de un puesto militar en un río de la amazonia cerca de la frontera que es ruta de narcotraficantes, informó entonces el ministro de Defensa boliviano Reymi Ferreira.
Dos oficiales, seis marineros y un sargento a quienes robaron las armas son procesados por el fuero militar.
Con 3.600 kilómetros en medio de la selva, la frontera entre Bolivia y Brasil es más grande que la de Estados Unidos y México y es ruta de cocaína y armas al mercado brasileño, según las autoridades.
Cocaína peruana y boliviana ingresa a Brasil desde Bolivia a través de la frontera porosa. Ese tráfico es un asunto prioritario en las relaciones de los países.
«La cooperación entre las policías de los dos países mejoró y trabajan bien», dijo el diplomático.
Brasil es el mayor comprador de gas boliviano pero las relaciones se han tensionado por más de un año por la decisión de ese país de acoger a refugiados políticos bolivianos.
«Las cosas han sido dilucidadas, ya ha pasado y no hay ningún problema», dijo Santos Rocha en un primer encuentro con la prensa tras presentar sus credenciales la semana pasada.