Se desbordaron en la iglesia católica de monseñor Lezcano, cientos de fieles católicos se dieron cita en la iglesia Nuestra Señora de Guadalupe, para cantar la mañanitas a la virgen morena, la reina de la esperanza.
La eucaristía fue presidida por el cardenal Leopoldo Brenes y se celebraban 484 años de las apariciones que la morena del Tepeyac le hizo a Juan Diego, el indio.
Las plegarias que eran elevadas por la feligresía a la virgen de Guadalupe estaban acompañadas con lágrimas, risas, emociones y esperanza de un pueblo que pide la buena andanza de nuestro país y del mundo entero.
Y es que toda Nicaragua celebró a la virgen de Guadalupe, le rendían honores como una muestra de agradecimiento por los favores recibidos.