Una especie de elefante críticamente amenazada fue fotografiada por estudiosos por primera vez en Sudán del Sur, en un acontecimiento que expande significativamente el rango conocido de esos animales. Pero incluso en esos remotos bosques del centro de África, enfrenta la amenaza de taladores y la guerra.
Más pequeños que los elefantes de la sabana, los elefantes del bosque viven en junglas tropicales y fueron fotografiados por cámaras colocadas en árboles en del estado de Western Equatoria, un área frondosa cerca del Congo y la República Centroafricana.
«Es por mucho la manada más norteña de elefantes del bosque que haya visto nadie en África», dijo Adrian Garside, co líder del estudio de Fauna & Flora International, en declaraciones a la Associated Press.
Las poblaciones de elefantes de los bosques declinaron 60% entre el 2002 y el 2011, al tiempo que perdían 30% de su área en el centro y el occidente de África, de acuerdo con un estudio publicado en la revista científica PLOS ONE.
Los elefantes del bosque tienen colmillos más derechos que los de la sabana y las cabezas y orejas son más redondas.
Las cámaras, remotamente activadas y colocadas en un área de más de 7.770 kilómetros cuadrados en el estado, capturaron además imágenes de otros animales previamente no registrados en Sudán del Sur, como el potamoquero rojo, el gato dorado africano, el pangolín gigante y el cervatillo de agua, dijo el grupo.
En un período de seis meses, las cámaras capturaron más de 20.000 imágenes de fauna. Chimpancés, leopardos, hienas y antílopes bongos fueron también fotografiados.
«Estamos probando que hay parte de hábitat que están prístinas e inexploradas, lo que es esperanzador», dijo Garside.
En otros países, los elefantes del bosque son amenazados intensamente por caza furtiva, dijo DeeAnn Reeder, co líder del nuevo estudio y profesora de biología en la Universidad Bucknell, en Pennsylvania.
Dijo que en África occidental, la mayor amenaza es la pérdida de hábitat.
«Está ocurriendo tala ilegal en Western Equatoria en estos momentos, y básicamente está desenfrenada», dijo Reeder.
La guerra en Sudán del Sur ha llevado a más caza furtiva por carne y marfil. Más de 50% de los elefantes en Sudán del Sur a los que se colocaron collares con radiotransmisores antes de la guerra han sido cazados desde el estallido del conflicto hace dos años, le dijo a la AP Paul Elkan, de la Wildlife Conservation Society.
Western Equatoria se ha mantenido mayormente en paz durante la guerra, pero esta semana estallaron escaramuzas allí entre rebeldes y soldados.