Un Ferrari de 1956 se vendió en Nueva York por 28 millones de dólares en una subasta en la que también estuvo el Porsche psicodélico de Janis Joplin.
El Ferrari, que se calculaba alcanzaría un precio de 32 millones de dólares, es uno de los autos más valiosos en haber sido subastados. Un Ferrari 250 GTO Berlinetta se vendió en 38,1 millones de dólares en Bonhams en 2014, el récord para cualquier automóvil en una subasta.
El Porsche 356C Cabriolet modelo 1964 de Joplin fue vendido en 1,76 millones, bastante más que los 600.000 que se esperaba recaudaría. Era blanco cuando ella lo compró usado. Ha estado en el Salón de la Fama y Museo del Rock and Roll en Cleveland durante las últimas dos décadas.
Un Pontiac Bonneville 1963 que fue de Roy Rogers alcanzó 308.000 dólares. Está decorado con armas y dólares de plata genuinos.