Patas arriba quedó una camioneta, luego de irrespetar la luz roja del semáforo e impactando contra un taxi que viajaba con tres pasajeros, en el sector de los semáforos del centro de salud de San Judas. Testigos dijeron que el conductor de la camioneta además de irrespetar la luz roja del semáforo, se desplazaba a alta velocidad, y es verdaderamente un milagro que resultara con golpes leves.
Gracias a Dios ninguno de los pasajeros resultó lesionados, solo uno de ellos era quien presentaba un ataque de nervios. Los agentes de tránsito serán los que tengan la última palabra para determinar la responsabilidad del conductor de la camioneta.
Gerardo Reyes