El triste hecho ocurrió en Bariloche. Según escribió en una carta, la mujer se quitó la vida porque algunos familiares sospechaban que era responsable del asesinato del esposo. Meses después la justicia determinó que no tenía nada que ver con el crimen.
Emelinda Quijón no mató a su ex marido Cipriano Alsina. Así lo estableció la investigación que se tramitó a partir del homicidio del hombre y que desvinculó a su ex mujer. Por eso, el juez de Instrucción Ricardo Calcagno dictó el sobreseimiento de la mujer que había sido imputada en el hecho.
El magistrado declaró en la resolución que el proceso penal que involucró a la mujer no afecta el buen nombre y honor de que hubiere gozado. Pero el sobreseimiento llegó cuatro meses después de que la mujer resolviera quitarse la vida a finales de diciembre pasado, informaron fuentes judiciales.
El fallo de la Justicia de Bariloche, recién trascendió esta semana. Calcagno dictó la resolución a finales de abril pasado y nadie la impugnó. Por eso, la causa se reservó a finales de octubre último hasta tanto aparezcan nuevos elementos de prueba que reactiven la investigación para identificar al autor del crimen.
Por lo pronto, el homicidio de Alsina sigue impune. Las fuentes recordaron esta semana que antes de tomar esa decisión, Quijón dejó una carta donde consignó que no soportaba la idea de que sus familiares más próximos sospecharan de ella. Allí, negó cualquier tipo de vinculación con el crimen de su ex marido.
Quijón y Alsina hace doce años que estaban separados, pero convivían bajo el mismo techo en el departamento 59 del edificio 5, en el barrio Ada María Elflein de Bariloche. Cada uno hacía su vida. El crimen de Alsina ocurrió la madrugada del 13 de diciembre del año pasado. Quijón encontró a su ex marido asesinado en su dormitorio y le faltaban 2.000 pesos, que había cobrado horas antes, un celular y una libreta, informaron entonces fuentes con acceso a la investigación. La mujer pidió ayuda a sus vecinos pero fue detenida.