La Policía de Fronteras del Ministerio de Seguridad Pública de Costa Rica, sigue las pistas a cinco hombres sospechosos de traficar en un sector montañoso de Limoncito de Cutris, limítrofe con Boca Tapada, en el cantón de San Carlos en la provincia de Alajuela y fronterizo con Nicaragua, donde ayer descubrieron un improvisado campamento y gran cantidad de armas de grueso calibre.
Según el Ministro de Seguridad Pública, Mario Zamora, se incautaron 15 fusiles entre ellos AK-47 y M-16, además de un lanza cohetes RPG-7.
También decomisaron gran cantidad de municiones, así como 10 estañones con combustible que desconocidos tenían cuidadosamente tapados para no ser detectados, de la misma manera un área que funcionaba como helipuerto.
Las autoridades precisaron que las armas están nuevas y muy cuidadas por lo que se descartó que provengan de los denominados "buzones de guerra" de la década de los ochenta, cuando operaron diversos grupos armados durante la guerra en Nicaragua.
El armamento estaba oculto en un sector montañoso, a donde las autoridades llegaron luego de pesquisas e informes que recibieron desde hace varios días, no se descarta que se trate de una red dedicada al trasiego de armas de guerra pero esta hipótesis aún no es plenamente confirmada.