En un insólito giro de tuerca en la vida real, dos ladrones que robaron un automóvil donde había un niño de ocho años, hicieron lo más inesperado posible.
En lugar de huir con él o dejarlo en la calle, los criminales se aseguraron de que llegara sano y salvo a su escuela antes de darse a la fuga en el vehículo robado.
Según las autoridades locales, la madre del pequeño había dejado a su hijo dentro del auto encendido en el estacionamiento de su trabajo para atender unos asuntos antes de llevarlo al escuela.
Tentados por el botín, el par de criminales entró al auto sólo para descubrir que había un niño dentro.
De acuerdo a la declaración del pequeño, al entrar al auto, los delincuentes le dijeron que su madre les había pedido dejarlo en la escuela.
Cerca de la entrada de la escuela primaria local, los profesores que recibieron al menor dejaron ir a los dos delincuentes porque creyeron que se trataba de un par de familiares.
La Policía no ha identificado a los criminales, quienes abandonaron el auto que robaron a unos kilómetros de la escuela donde dejaron al pequeño, detalla el portal The LadBible.
Excelsior