Los servicios de emergencias han recuperado al menos 104 cadáveres entre los escombros de la avalancha en una mina de jade en el Estado Kachin, en el noreste de Birmania (Myanmar), según informa la prensa local. Los equipos de emergencia trabajan en busca de supervivientes en la zona, a pesar de que no se han facilitado cifras oficiales sobre el número de desaparecidos.El alud ocurrió en la madrugada del sábado en Hpakant cuando una columna de tierra y desechos de al menos 80 metros cayó sobre unas 70 chozas precarias donde vivían los trabajadores de la mina, indicaron algunos testigos. Hpakant, situado a más de 1.100 kilómetros al norte de Rangún, la antigua capital, es un remoto distrito situado en una zona montañosa donde proliferan las minas de jade. Birmania es el mayor productor de jadeíta, una codiciada variedad de jade, principalmente en las montañas de Kachin, donde el Ejército libra combates desde 2011 contra la guerrilla de la minoría kachin.
Global Witness denunció el mes pasado las situaciones precarias en las que trabajan los buscadores de jade en las minas, propiedad en ocasiones de señores de la guerra, narcotraficantes o generales de la antigua junta militar. En un informe, la ONG aseveró que el comercio de estas gemas está valorado en unos 31.000 millones de dólares (unos 27.800 millones de euros), la mitad del PIB birmano, y principalmente se exporta a China. Las cifras oficiales son más bajas debido a la opacidad del tráfico de jade, que en parte se transporta de forma ilegal a China, donde es muy apreciado.
Agencias