Dos hermanos mexicanos fueron sentenciados el viernes a 18 años de prisión y un tercero a 10 años por haber transportado ilegalmente a mujeres desde México a Estados Unidos y haberlas forzado a prostituirse en Nueva York y alrededores.
La juez Carol Amon impuso las sentencias en la corte federal de Brooklyn contra Benito López-Pérez y Anastasio Romero-Pérez, los que pasarán más tiempo en prisión, además de José Gabino Barrientos-Pérez, que pasará una década.La red de tráfico sexual que los hermanos operaban tenía su origen en el pueblo mexicano de Tenancingo, en el estado de Tlaxcala,desde donde otros mexicanos extraditados a Estados Unidos también han sido acusados de operar redes de prostitución.
Aunque los tres mexicanos tienen apellidos compuestos que no coinciden, la fiscalía del distrito este de Nueva York señaló que se trata de hermanos.Según el expediente del caso, los hermanos Pérez están acusados de prostituir a al menos a cuatro mujeres. Dos de ellas tenían de tan sólo 14 años. Tras mantener relaciones románticas con los acusados y recibir promesas de un buen futuro, fueron obligadas a prostituirse primero en México y después en Estados Unidos.
Las jóvenes eran transportadas por conductores a distintas ubicaciones de Nueva York y el dinero que ganaban era enviado a familiares de los acusados en México. Los hermanos también abusaron de ellas sexualmente y las castigaban por no trabajar lo suficiente, asegura el expediente. Amenazaban además con usar la violencia contra los familiares de las víctimas para asegurar que así no se escapasen.
En un segundo caso de red de tráfico sexual, el mexicano Antonio Lira-Robles fue extraditado y compareció en la misma corte en noviembre del 2012. Su red de prostitución, que organizó junto a dos de sus primos, también nació en Tenancingo y, al igual que el caso de los tres hermanos, las víctimas eran traídas a Nueva York.
NUEVA YORK (AP)