El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó el miércoles revisar las relaciones con Estados Unidos tras la filtración de documentos que probarían que la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense espió de forma masiva a empleados de la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA), interceptando incluso llamadas y correos electrónicos del otrora ministro de Energía y Petróleo Rafael Ramírez.
«El día de hoy se dio a conocer unos documentos secretos. Fueron dados a conocer por el agente (Edward) Snowden, que ustedes conocen, y por otros agentes de la agencia NSA. Estos documentos han desvelado que Estados Unidos y sus agencias de inteligencia, y la embajada de Estados Unidos en Caracas (…) estuvieron espiando la vida de 10.000 trabajadores de la industria petrolera», dijo Maduro en un acto público televisado.
«Por eso yo he ordenado una investigación (y) le he ordenado a la canciller (Delcy Rodríguez) que cite mañana al encargado de Negocios de Estados Unidos (Lee McClenny) y le entregue una nota de protesta. Y le he ordenado a la canciller que iniciemos una revisión integral de la relación con el gobierno de Estados Unidos, porque Venezuela se respeta», aseveró.
De acuerdo a versiones de la televisora regional Telesur la NSA «con la ayuda de la embajada de este país en Venezuela, espió las comunicaciones internas, correos electrónicos, perfiles de empleados y otros datos» de PDVSA, «incluyendo a funcionarios de alto nivel como Rafael Ramírez».
«El documento fechado en marzo de 2011, con la etiqueta «ultra secreto», fue proporcionado por el ex contratista de la NSA Edward Snowden y obtenido por Telesur», señaló la televisora, destacando que un «analista penetró en la red interna de PDVSA en algún momento a finales de 2010».
Maduro sostuvo que el espionaje tenía como propósito «sabotear la industria petrolera» por ser «la columna vertebral de la economía venezolana», y «derrocar el gobierno» del fallecido presidente Hugo Chávez, su predecesor y padre político.
El gobernante afirmó que los estadounidenses «se han acostumbrado a espiar al mundo. Espían a países de Europa como Alemania, espiaron a Brasil en el pasado», recordando episodios que se conocieron por los documentos filtrados por Snowden.
Adelantó que próximamente » iré anunciando las decisiones que vaya tomando para que el gobierno de los Estados Unidos pida perdón al pueblo de Venezuela por este agravio que ha cometido».
Las relaciones entre los dos países tienen un historial de tensión desde la llegada al poder del fallecido Chávez en 1999, y la misma situación continuó con Maduro, que fue elegido en elecciones anticipadas en abril del 2013.
A pesar de las fricciones, y de estar sin embajadores desde 2010, ambos países mantienen un intenso intercambio comercial.
CARACAS, Venezuela (AP)