Las intensas lluvias que azotan a Uruguay desde el viernes provocando inundaciones, principalmente en el centro del país mantenían este jueves a más de 2.000 personas fuera de sus hogares, siete rutas cortadas y fuertes daños en calles y caminos, informaron las autoridades.
Son «343 personas evacuadas» en todo el territorio uruguayo y «el número total de autoevacuados en el departamento de Durazno es de un total de 1.980», dijo Diego Cánepa, prosecretario de la Presidencia y director del Sistema Nacional de Emergencia (Sinae), en rueda de prensa.
Del total de personas fuera de su hogar en Durazno (centro), debido a la crecida del río Yí, 310 son evacuados y permanecen en los centros de atención dispuestos las autoridades departamentales. Mientras que 880 personas fueron llevadas a viviendas de amigos o familiares y unas 1100 son autoevacuados.
Soriano, Treinta y Tres y Canelones, son los restantes departamentos donde aún hay evacuados.
Casas aisladas en medio de un gran caudal de agua, calles inundadas que impiden el paso de los autos y de los transeúntes, son el desolador paisaje en varias zonas rurales y suburbanas del país.
Cánepa advirtió que se vive «una situación que obviamente no es normal en el país, se ha dado una inestabilidad permanente», en las condiciones climáticas.
El suministro de energía eléctrica recuperó su funcionamiento en miles de hogares que el miércoles sufrieron cortes de luz y solo quedan sin energía 627 clientes.
MONTEVIDEO, (AFP)